¿Sabes de qué trata la fotografía de la naturaleza? ¿Conoces el código ético para respetar el ambiente y a la vez disfrutar de la fotografía? Te lo contamos todo en este artículo.
A los que seguís nuestra comunidad de Instagram, sabréis que nos apasionan las fotografías de paisajes naturales, puestas de sol, montañas, flores, pequeños insectos… por eso hoy, estamos de celebración: Es el día mundial de la Naturaleza y la Vida Silvestre, un día que ofrece la ocasión de celebrar la belleza y la variedad de la flora y la fauna salvajes.
Para enmarcar la grandiosidad de todo lo que nos ofrece nuestro planeta, cada vez son más las personas que practican la fotografía de naturaleza. En España se practica esta modalidad desde mediados del s. XIX y tanto fotógrafos profesionales, como viajeros, científicos, escritores, cazadores y aventureros, han realizado sus aportaciones en este campo. Nombres como los de Galan Rowell son conocidos en este mundo, ya que fue uno de los pioneros en fotografiar el mundo natural y a nivel nacional podemos también hablar de Oriol Alamany, fotógrafo y miembro fundador de AEFONA, Asociación Española de Fotógrafos de Naturaleza.
Este día también puede servir para crear consciencia y valorar la multitud de beneficios que la conservación natural tiene para la humanidad y nos recuerda la necesidad urgente de combatir los delitos contra el medio causada por la actividad humana, que pueden acarrear consecuencias negativas de gran alcance, por ello es necesario tener en cuenta el código ético para respetar el medio ambiente y a la vez disfrutar de la fotografía. Antes de entrar en estas prácticas hacemos un repaso de los diferentes tipos de fotografía de naturaleza:
- Fotografía de paisaje: se captan grandes escenarios naturales y se trabajan las grandes profundidades de campo. Muchas veces es necesario confiar en un trípode para poder estabilizar la imagen y captar mejor los detalles.
- Fotografía del mundo salvaje: En este tipo d fotografía se utilizan grandes objetivos, teleobjetivos o telescopios y se aplica la modalidad Hide para captar especies salvajes sin ser visto.
- Macro fotografía y macrofotografía extrema: tomadas en distancias muy cortas y se suele realizar a flores, hongos, insectos... con la segunda se trata de captar detalles muy aproximados como por ejemplo el rostro de una abeja.
- Microfotografía: captada a través de microscopios a elementos como por ejemplo algas, bacterias, etc.
- Fotografía subacuática: para este tipo de fotografía aparte de necesitar cámaras especializadas para fotografiar debajo del mar, se necesita contar con equipos de inmersión para poder llegar a capturar elementos interesantes como por ejemplo corales, peces, moluscos, que no podemos ver en el día a día.
- Astrofotografía: para este tipo de fotografía, el favorito de muchos, se necesita estar equipado con soportes para poder capturar las estrellas o la vía láctea evitando cualquier tipo de movimiento que distorsione la imagen. Un fundamental para poder realizar la astrofotografía es el star tracker y un trípode estable.
Son muchos los ambientes naturales que despiertan nuestro interés y cada uno de ellos representa unas particularidades por ello, AEFONA, publicó en 2009 un código ético que engloba una serie de buenas prácticas en la fotografía de naturaleza. Puedes consultarlo en su página web oficial, pero aquí te ofrecemos 10 tips para ir en línea con este código ético:
- Interfiere lo menos posible en el entorno: Sé un buen observador pasivo en este caso y trata de captar una situación natural sin alterarla. El sujeto prevalece a la fotografía por ello trata de adaptarte tú al medio ambiente y que no sea este un escenario para modificar al gusto del ojo humano.
- Conoce el escenario: aparte de ir preparado a nivel técnico y se soporte fotográfico es importante previamente conocer y adentrarse en el mundo que vas a fotografiar.
- Documentos en regla: según el escenario que elijas, puede estar protegido, por ello es crucial asegurar que cuentas con la documentación necesaria para realizar tus fotografías en ese escenario.
- Sé totalmente limpio: evita manipular el entorno de forma que se produzcan cambios irreversibles. De la mano del punto 1, nos debemos adaptar nosotros al entorno y no que este se adapte a nuestras prácticas. Aparte de evitar dejar basura y residuos, si te tienes que ocultar por ejemplo puede ser con las mismas ramas de un arbusto en lugar de con un elemento extraño que pueda alterar la calma del lugar.
- Evita la excesiva proximidad: Antes de realizar esta práctica ya te habrás informado de cada una de las especies que vas a fotografiar, por ello también tendrás que tener conocimiento de los factores que pueden causarles estrés o intimidación a por ejemplo los animales que vayas a fotografiar. No te acerques mucho y trátalos con amabilidad desde la distancia.
- Ten en cuenta la estacionalidad: Algunas especies son más sensibles en una temporada que en otra. Por ejemplo, evita fotografiar aves en sus nidos, ya que, aparte de alterarlas, puedes llamar la atención de depredadores sobre el sujeto.
- No des comida: no se debe alimentar a la fauna para evitar comportamientos poco naturales si se capturan animales como cebos vivos se debe tener cuidado al representar la imagen y el autor debe informar sobre ella en la misma imagen.
- No traslades: Como en el punto 1 y 4, la idea sería: “se mira, pero no se toca”. Al trasladar una especie de un lugar al otro a parte de crear una alteración puedes no conocer si esa especie la estás trasladando a un hábitat que no es el suyo.
- No acudas a centros de animales en cautividad: En algunos de estos espacios como por ejemplo los zoológicos o circos prevalecen los intereses económicos a costa de la exposición de animales por ello muchas veces las condiciones en las que se encuentran no son nada favorables. Trata de evitar estos lugares y si acudes informa sobre en qué condiciones y contexto de ha obtenido la imagen y si se trata de animales en cautividad o si su libertad de ha restringido por algún motivo.
- Divulga estas prácticas: Ya sea en tu grupo de amigos fotógrafos o en tus documentales o reportajes es bueno que todo el gremio esté informado sobre estas buenas prácticas.
Como vemos, a medida que avanzamos en tecnología y soportes que mejoran nuestras fotografías, también crece el interés por ir más allá y capturar elementos y momentos que no se encuentran siempre a nuestro alcance. Por ello, todo este avance debe ir acompañado de una mayor consciencia ética y respeto a la naturaleza, para que el día de mañana podamos seguir disfrutando de todas las maravillas que nos brinda nuestro planeta. El manual de buenas prácticas de AEFONA no está en pausa, y el pasado mes de febrero empezó la puesta en marcha de la actualización de éste; puedes encontrar más información aquí.